Siempre regreso feliz de mis viajes, porque vuelvo; y triste, porque regreso. Después los guardo en este escondite; para que no se pierdan, para que nunca terminen.

miércoles, 27 de febrero de 2013

El fotógrafo de señoritas






Si yo tuviera un amigo en Dinamarca, tendría que llamarse Eddy.
Eddy, el vikingo. Claro.

Pero no te confundas, mi amigo Eddy (el vikingo) no sería un vikingo cualquiera… Sería un espía al servicio de la reina en los duros y gélidos inviernos daneses. Pero un espía bueno. Así que para que tú no te enterases, durante el día se dedicaría a hacer fotos a las manzanas. Sí, eso. Así nunca levantaría sospechas.

Después de sobrevivir a todo tipo de tiroteos, bombas y atentados, durante todas las noches del gélido invierno, acudiría puntual al Ballet de Copenhague. Cuestiones de estilo y de corazón, para qué te voy a mentir. Llegaría con su negra capa, impoluta, y su media sonrisa, tarareando “mi casita de papel”. Para no levantar sospechas, ya te digo.

Mi amigo Eddy, el vikingo, el fotógrafo de manzanas y el espía, sería muy conocido entre bambalinas. Así que pronto, te aviso, todas las artistas, las aristócratas e incluso, algunas putas, querrían que el fotógrafo de manzanas retratara sus peras. Y él, con su media sonrisa, las llevaría a unos sitios súper recónditos para desvestirlas bastante con sedas y despojarlas de colores y conseguiría, magistralmente, desde su visor, lo más hermoso de las hermosas señoritas, de su alegría, de su tristeza, de su mirada, de sus hombros, de sus pechos, de sus piernas… de su belleza…

Ya de madrugada, mi amigo Eddy, el vikingo, el fotógrafo y el espía, regresaría a casa y se encontraría, en más de una ocasión, con sus manzanas mordidas… pero nunca le importaría… ¡eso, nunca le importaría! así que se iría hasta el puerto y al son de mástiles y banderas degustaría el mejor café de toda la Escandinavia entera.

Y tendría una pequeña hija pequeña a la que contaría historias maravillosas de cuando la vecina Karen estuvo en el África, de cuando William se planteaba ser o no ser…

Sí, sí, decidido.
Si yo tuviera un amigo en Dinamarca, tendría que llamarse Eddy.
Eddy, el vikingo. Claro.






9 comentarios:

  1. Eres un artista!!!
    Te has planteado escribir un libro alguna vez...????
    Yo lo compraria fijo.....

    ResponderEliminar
  2. McBauman es el más grande. Y un honor ser parte de su grán vida. Lo que has escrito sobre mí no tiene palabras. Es precioso. Pero sobre todo el tiempo que te has tomado para escribir si tuvieses un amigo en Dinamarca.

    Es que "ya" tienes un amigo en Dinamarca que se llama Eddy, Eddy el Vikingo. Y a mi hija, cuando le cuento por las noches sobre los jardines de Karen Blixen a las orillas del puerto de Rungsted, le digo sobre esos acogedores cafes cortados tan especiales que me tomé con un gran amigo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya tú sabes que yo sólo cuento lo que me pasa. No he inventado ni media palabra. Si acaso me he quedado corto.
      Un abrazo Eddy, mi amigo.

      Eliminar
  3. .
    Hahahahahahaaaaa...

    ... ha estado bien, pero me sigo riendo, vaya por Dios Hahahahahaaaa


    - LULO -

    ResponderEliminar